Margarita Serrano
Licenciada en Derecho, abogado experto en protección jurídica a la persona mayor y mediadora familiar con especialidad en dependencia. Dirige Mayores Abogacía, una oficina de asuntos jurídicos para orientar en la solución de problemas a la persona mayor.
Los nuevos tiempos que estamos viviendo hacen compleja la sociedad actual, con profundos cambios en toda su estructura.
El colectivo social de la tercera edad no es ajeno a esta transformación, de hecho, el paulatino envejecimiento de la población es una realidad que implica un aumento de personas mayores con nuevas circunstancias personales y sociales que afrontar.
Mayores Abogacía tiene como finalidad prestar un servicio de asistencia legal a personas mayores, que se planifica y se desarrolla en función de tres necesidades:
1- Orientación jurídica.
Atendiendo las dudas de naturaleza legal que surgen en la vida diaria.Realizando la gestión y trámite de documentos de índole jurídica con la Administración y particulares.
2- Información y prevención.
Información de derechos y asesoramiento sobre cómo realizarlos, potenciando que la persona mayor continúe haciéndose cargo de su vida y asuntos económicos y legales.Prevención de futuros conflictos y problemas por medio de instrumentos que la ley pone a nuestro alcance, protegiendo así más, los intereses de las personas mayores y procurándoles una vida más segura y tranquila.
3- Defensa en Tribunales.
Para los supuestos en que sea necesario formalizar alguna actuación en el Juzgado.Información sobre asistencia judicial y documentos judiciales.
Es un programa completo diseñado específicamente para lograr una tutela jurídica real para los mayores.
Valor
El valor que sostiene Mayores Abogacía es la persona, en sí misma considerada, y lo proyecta en una labor sensible y responsable, acercando a la vida y circunstancias personales de cada uno, un mejor conocimiento de los mecanismos de protección que nuestro ordenamiento legal ofrece, y en base a consideraciones como:
- Informar con claridad y sencillez.
- Dedicar más tiempo a explicar con detalle.
- Asesorar con tranquilidad.
- Emplear un lenguaje comprensible.
- Confirmar que se recibe correctamente la información.