Margarita Serrano
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I. Concretar la denominación del colectivo de personas a las que prestamos servicios significó un obstáculo en el proceso de creación de Mayores Abogacía. ¿Qué mención emplear? Era importante elegir correctamente. Decidimos optar por la expresión «personas mayores» y acertamos, a pesar de las dudas. Posteriormente, acercándome a la Sociología, caí en la cuenta de que no fue tan banal cuestión, encontrar el término correcto y que en torno a ello hay mucha especulación por parte de esta disciplina.
II. ¿Quiénes son los viejos de hoy?
La RAE para definir la palabra «viejo» simplemente señala: «Se dice de la persona de edad».
Desde un planteamiento con vocación crítica, que se centra en el análisis de algunas dimensiones actuales del concepto vejez, proponemos esta sencilla y básica cuestión: hablamos de quiénes, ¿de personas mayores o de viejos?
Tres ideas para la reflexión:
1- La vejez es una categoría institucionalizada, es decir, creada y mantenida dentro de un cierto orden social que la va reproduciendo y transformando. O dicho de otro modo, existirán múltiples formas de vejez dependiendo de los sentidos y prácticas que les den la vida y las mantengan.
Actualmente se han multiplicado los discursos y las actuaciones en torno a la vejez, las instituciones que tratan de la vejez, los procesos de legitimación de la vejez.
Como esfera social se ha hecho presente en las sociedades occidentales actuales, con tanta fuerza que incluso hemos llegado a hablar de sociedades envejecidas y hablar de una sociedad envejecida no describe a una sociedad, la clasifica.
2- La categoría de vejez es poliédrica y las caras del poliedro, no son ni más ni menos que aquellos aspectos de los discursos sobre ella, más capaces de ganarse un lugar visible en el espacio privado y, sobre todo en el público.
Que las personas envejezcan es una cosa; cómo entendemos lo que de ese envejecimiento es la vejez, es otra.
Fijarla y caracterizarla de modo inequívoco es complicado, la vejez resulta confusa, y su estudio complejo; la vejez está construyéndose a base de acciones simultáneas en muy diversos campos (medicina, economía, política, ética, literatura, sociología…) y por diversos agentes individuales y colectivos (familias, empresas, gobiernos y parlamentos, universidades, investigadores…).
3- No sólo hay cada vez más persona longevas en nuestra sociedad (cosa que en principio sería motivo de felicitación y, sin embargo, el aumento de la vejez se presenta como problema o amenaza, pudiendo ser perfectamente una fuente de crecimiento social) sino que en torno a ese hecho, y a otros conectados, se han construido con fuerza conceptos sociales como los de viejos, envejecimiento y vejez.
La relación entre ellos, si bien no es totalmente coordinada, se podría esquematizar como sigue:
–los viejos son los individuos que viven la vejez, y
–el envejecimiento es un proceso vital de larga duración una de cuyas fases, la anterior a la muerte, se conoce como vejez.
Por tanto la vejez tiene aspectos dinámicos(es parte de un proceso) como estáticos( es un estado circunscrito a un cierto período).
III. En consecuencia: con la complejidad de la categoría vejez, no está del todo claro ni quiénes, ni cómo son los viejos de hoy, cosa que no ocurría hace pocos años.
Parece que los viejos están cada vez mejor. Sin embargo, pensemos que en la medida que eso ocurre sucede que dejan de ser viejos, pasan a ser personas mayores y por tanto escapan de la vejez como categoría social. A medida que las personas mayores o adultos mayores han ido aumentando, la vejez se ha ido reduciendo.
¿La conclusión?: como todo poliedro, la vejez tiene varias caras.
Es una fase del envejecimiento heterogénea, diversa, distinta. Ni siquiera, por más y más que se intente, en el marco de una misma sociedad se pueden hacer muchas afirmaciones generalizadoras sobre la vejez. Y como venimos argumentando, el envejecimiento demográfico, es solo una forma de representar la vejez pero ni la única ni la más relevante, aunque sí sea el mecanismo más utilizado para legitimar los discursos sobre el envejecer en nuestras sociedades occidentales.
¿Quién y por qué mueve todo esto?
Próxima publicación: Herencia y Testamento.
